jueves, 14 de octubre de 2010

En días como hoy

Es en días como hoy en los que ni estoy contenta ni estoy triste. Si tuviera que reproducir con palabras mi estado diría 'bueno, bien...' Sin más. Y sé que hoy puede ser un gran día porque esta noche voy a ver a mi gran ídolo, pero a pesar del subidón irracional que eso me provoca, no puedo dejar de lado mis ya casi eternas preocupaciones y miedos. Y lo cierto es k empiezo a estar más k harta de ellas y de ellos. De las preocupaciones y de los miedos. Una de ellas, de mis preocupaciones quiero decir, me ha acompañado sin descanso durante los últimos años. Y, hasta ahora, siempre he pensado que podía vencerla, 'querer es poder', me he dicho siempre. 'Si nos queremos, todo lo demás es posible, cueste lo que cueste', pensaba. Pero a lo mejor no. A lo mejor quererse no es suficiente. Porque yo sé cuánto le quiero yo a él, pero nunca he tenido claro cuanto me quería él a mí. Pero aún así, aún pensando que él me quiera algo, tal vez no, tal vez no sea suficiente.

Yo siempre he asumido tan estoicamente como me ha sido posible que él no me pudiera dar lo que yo deseaba y necesitaba. Ahora pienso que quizás es al revés, que tal vez sea yo la que no puede darle lo que él necesita porque ni él mismo sabe lo que necesita. Yo estaba feliz en esta nueva etapa porque creía que algo había cambiado entre nosotros, que él estaba dispuesto a arreglar las cosas para conseguir ser una pareja y, además, una pareja normal. Pero ya no sé si eso es así o fue otra ilusión tonta que yo me hice con su inestimable ayuda. A veces creo que soy una peonza que da vueltas todo el rato casi, casi, en el mismo punto, desviándose poco, poquito, de su lugar de partida.

No hay comentarios: