jueves, 6 de agosto de 2009

Ser normal

A lo mejor sois de los que pensáis que nadie es normal, que quien más quien menos tiene sus particularidades o, lo que es lo mismo, que todos somos un poco raritos. Yo creo que alguna vez también he pensado así, pero creo que ha sido más bien para no sentirme tan sola y justificar así mi rareza congénita. Porque pensándolo bien, no es cierto eso de que no haya nadie normal. Yo estoy rodeada de gente normal (no todos, claro, pero sí bastantes). Tengo un montón de amigos normales que tienen, asimismo, una vida ordenada y normal que atiende a ciertas normas establecidas. Tienen una pareja normal con la que hacen cosas normales y tienen también discusiones normales sobre problemas normales. Tienen una familia normal que suele hacer también cosas normales. Tienen una salud normal que no suele preocuparles por eso precisamente, porque es normal.

Pero es que en mi vida nada de eso es normal: en vez de tener pareja tengo un 'no-novio', en vez de tener una familia, tengo a Naciones Unidas y UNICEF las dos juntas, en vez de tener salud tengo dos excursiones al hospital todas las semanas. Joder, es que en mi vida no es normal ni mi gata, que nació ya totalmente loca, pero claro, el ambiente en que se está criando la ha convertido directamente en carne de presidio.

¿Acaso no me merezco ser normal????

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